“Nos ocupamos de dar soluciones a los problemas que enfrentan las empresas”

Galdas es una consultora que se ocupa de dar soluciones a los problemas que enfrentan las empresas, analizando sus estrategias, generándoles contactos de negocios y ayudándolas a entender cómo vienen los mercados. Además, las acompañan en los aspectos institucionales y de gobierno. Su presidente, Carlos Salinas, conversó con Informe acerca de la experiencia de Galdas en otros países -como Brasil y Paraguay- y sus diferencias con Argentina; el desarrollo digital de las Aseguradoras; el ciclo de renovación de contratos en Reaseguros; el doble impacto de la guerra Rusia-Ucrania y el contexto inflacionario global; la carga impositiva del sector asegurador y el rol de la Superintendencia de Seguros, entre otros temas.

Entrevista a Carlos Salinas, Presidente de Galdas S.A., Director Ejecutivo de la Cámara Argentina de Reaseguradores y de la Cámara Insurtech Argentina.

– ¿Cuáles son los desafíos y las oportunidades de Galdas como consultora en seguros y reaseguros en este escenario pospandémico, donde se observa un acelerado proceso de digitalización en el sector?
– Nosotros tenemos como objetivo siempre estar atento a los movimientos de los mercados. Y esto nos llevó desde hace cuatro años a involucrarnos en los procesos digitales relacionados a seguros y a reaseguro. Incluido lo institucional, donde hoy estoy acompañando a un grupo de empresarios en la Camara Insurtech Argentina como director ejecutivo. Hay muchas oportunidades en esta área y las estamos aprovechando a pleno.

– ¿En qué consisten los servicios que brinda Galdas tanto para Aseguradoras como para Reaseguradoras y qué aspectos abarca su cobertura?
– Nosotros nos ocupamos de dar soluciones a los problemas que enfrentan las empresas. Analizamos sus estrategias, les generamos contactos de negocios y los ayudamos a entender cómo vienen los mercados.
Además, también los acompañamos en los aspectos institucionales y de gobierno.

– ¿Cómo es la experiencia de la consultora en otros países como Brasil y Paraguay, y qué diferencias observa en esos mercados respecto a Argentina?
– Respecto de la operatoria en sí, son muy parecidos, cambian los volúmenes de negocios y la cultura de los mismos. La parte más fuerte es cómo se comportan ante cambios económicos y sociales. Argentina tiene más coberturas obligatorias que otros mercados de Latam y esto genera una gran diferencia en la parte aseguradora. Y respecto del reaseguro, Brasil es un país de gran retención local y como reaseguradores, con mayores capacidades, lo que hace que la cesión sea muy baja comparada con el tamaño de mercado. Paraguay no tiene, por supuesto, comparativo con los antes mencionados, ya que es un mercado en crecimiento y aún con muchos desafíos. Pero los tres tienen un gran potencial aún porque el fuerte en crecimiento sigue siendo Autos y hay un gran desafío para las aseguradoras de generar mercado en otras coberturas, sobre todo en Personas.

– ¿Qué reflexión realiza sobre el desarrollo digital de las Aseguradoras y la tecnología aplicada al seguro, especialmente desde su visión como Director Ejecutivo de la Cámara Insurtech Argentina?
– Hemos logrado un gran avance en relación con otros países de Latam, ya que tenemos mucha materia prima local destacada a nivel internacional y regional. Por supuesto, con escases en lo que se relaciona a inversiones y eso se debe a la situación del país.
Si hablamos puramente de las aseguradoras, el proceso de inversión es lento aún, pero lo más importante es que ya no hay que convencer a nadie. PAS, Aseguradoras y otros actores ya saben que este es el camino.

– ¿Cómo fueron las condiciones y qué características tuvo el ciclo de renovación de contratos en Reaseguros?
Las renovaciones de contratos automáticos en nuestro país siguen siendo tranquilas y a costos adecuados. Somos un mercado rentable y basado en dólares con capacidades que no son un problema para el mercado internacional. Seguimos con buen apoyo de security y se van abriendo nuevas puertas. Se ha generado también un gran crecimiento en la posición de los reaseguradores locales que ya desde hace 10 años vienen creciendo sin detenerse, a pesar de que en algún momento un superintendente decidió bajar su participacion al 25%. Tenemos mucho para dar aún.

– ¿Cómo analiza el doble impacto en el Reaseguro global de la guerra Rusia-Ucrania y del contexto inflacionario en las diferentes economías del mundo? ¿De qué manera influye a nivel local?
– La verdad es difícil todavía saber cómo o qué va a dejar esta guerra, por lo tanto aún no podemos ver los efectos sobre nuestro sector a nivel mundial. Lo que vemos desde afuera -sin estar en el lugar de los eventos- son los efectos sobre la economía, la falta de suministros, energía, alimentos etc., y estos temas están directamente relacionados a pérdidas que, sin duda, recaen sobre los seguros y reaseguros. Estos efectos aún existirán por un tiempo más, ya que todavía hay trabas para la entrega de suministros y los problemas en la provisión de energía. Por supuesto, la pérdida de vidas y los cambios en la vida de quienes han tenido que dejar su casa, su trabajo y sus familias, sin duda ya tiene efecto directo sobre las coberturas. Debemos esperar a septiembre u octubre de este año si nos acercamos a un cierre de las hostilidades ante el invierno, o si la locura sigue.
Sobre la inflación en el mundo, está claro que está directamente relacionada a la guerra y a la falta de suministros. Pero también a la especulación, que es parte del ser humano, ese ser humano que dice protegerse de lo que viene o de lo que estima que viene.

– ¿Qué evaluación realiza sobre la carga impositiva del sector asegurador y las consecuencias de una economía en crisis, con altos niveles de inflación, en el día a día de las Aseguradoras?
– Hacer una evaluación de la carga impositiva no es fácil, hemos pasado por todos los modelos. Pero necesitamos trabajar fuertemente el tema desde el sector privado. No podemos acercarnos al Estado solo a pedir que la bajen, debemos ir mejor preparados y con elementos que se puedan discutir. Las consecuencias de la crisis también es un tema complicado, ya que la crisis es principalmente política y está fuera de nuestro alcance. Nuestro accionar como mercado nunca ha superado la SSN, y los temas que afectan al mercado están muy por arriba de la SSN. Están relacionados a los problemas de la sociedad en su conjunto. Por un lado, es la falta de políticas públicas que acompañen el desarrollo del mercado, un mercado que sin duda acompaña al Estado cuando invierte y a la sociedad cuando cubre los siniestros.

– ¿Cuál es su visión sobre el rol de la Superintendencia de Seguros respecto a la capitalización de las compañías y a los temas que conciernen a la actividad?
– Yo no puedo decir u opinar sobre el rol de la Superintendencia de Seguros respecto de la capitalización de las compañías. La Superintendencia es un organismo de control, es autoridad de supervisión, fija reglas y controla las mismas. Y el mercado si quiere estar en orden debe cumplirlas. Por supuesto que hay situaciones ambientales que afectan a ese cumplimiento, provocando situaciones en las aseguradoras que las hacen ver diferentes. Entre ellos, las inversiones obligatorias dentro de una situación económica difícil y con un alto crecimiento de los siniestros. Estos aspectos ambientales pueden ser inclusive los problemas de importación, que se sienten en los siniestros de automóviles, y que generan aumento en los delitos de robo. Mi visión siempre será sobre el sector privado, ya que el Estado se organiza desde un lugar donde no tenemos participación, pero sin dejar de ver cuánto pueden afectar sus decisiones, y ahí tenemos mucho para hacer.